Es en su Palabra que el Señor viene a este mundo poseído... Pues el mundo desea liberarse de su plaga secreta, y el Señor libera el mundo. Pero su íntima actividad vital tan malvada, en su estado libre es más malvada que en su estado sujeto. Cuando el mundo está sujeto se queja de presiones y plagas; pero si Yo lo libero, la actividad del mundo volando se introduce en los cerdos, y por sí sólo se lanza al mar de la depravación. Y los seres humanos del mundo algo mejores incluso intentan a apartarme de ellos porque para su industria mundana, Yo, de ninguna manera les serviría. Pues más claramente dicho: estos Gerasenos son el auténtico punto esencial del mundanismo. Leer más...
