28 de febrero de 2016

El Mandamiento principal

Amadme a Mí, pero como los niños aman a sus padres antes de la liberación de sus lenguas, como una novia sincera ama a su novio antes de conocerlo más íntimamente. Entonces antorchas de Luz fluirán por tus lomos.
¡Por esto, primeramente debéis modificaros y amar en primer lugar! Solo entonces vuestra fe se volverá viva. Si no fuere así, vuestras cabezas quedarán atiborradas de cosas, como si fuese el estómago de un buey, pero vuestros corazones se quedarán vacíos como un pastel de viento. Aplicad todo vuestro conocimiento de amor a vuestros hijos y luego, seguidamente volveros iguales a ellos.
Esta es la comprensión de: “El pan nuestro de cada día” Leer más...