17 de febrero de 2019

¿Cómo es posible que la Satana sea tan malvada siendo una criatura creada por Dios? Parte 10.

¡Dicho y hecho, y la obra maravillosa estuvo delante del hombre! Con una complacencia infinitamente grande, el poderoso, sapientísimo artífice la contempló. Pero la obra es solo una máquina de su voluntad, como si estuviera muerta y no se mueve de manera diferente, sino de acuerdo con la voluntad del maestro, y solo habla de lo que el maestro de la obra le inculca en el pensamiento y quiere que sea proferido por la obra misma.
Entonces la sabiduría del maestro se concentró y dijo: “La obra está lista, pero no hay nada en ella más que mí mismo; si la dejo así no me servirá de mucho, pero si le concedo a la obra una vida propia, libre e independiente, entonces debo estar preparado para aceptar la eventualidad que se vuelva en mi contra y que haga según su libre voluntad”
Pero ciertamente Yo soy poderoso sobre todas las cosas. Si ella quiere sobrepasar los límites que le prescribo, entonces sabré cómo oponerme porque ella ciertamente seguirá siendo obra mía para siempre.
Así habló para sí mismo el hombre más sabio, y así lo hizo. Leer más...